Existe un recurso legal que ofrece la posibilidad a particulares y autónomos de hacer frente a pagos acumulados o, inclusive, eliminar total o parcialmente una deuda, siempre que exista la imposibilidad de hacerle frente.
Nos referimos a la Ley de la segunda oportunidad, la cual fue promulgada en el año 2015 y que permite a una persona sortear una mala racha económica o un endeudamiento excesivo, pero respetando los derechos de cobro que tienen los acreedores.
En este artículo, verás de qué se trata la Ley de la segunda oportunidad, su coste y los requisitos para activarla.
¿Qué es la Ley de la Segunda Oportunidad y cómo funciona?
La Ley de la Segunda Oportunidad tiene como finalidad principal hacer una reestructuración en las deudas para que puedan ser pagadas. Aunque existen casos muy puntuales en los cuales la justicia puede otorgar el beneficio de exoneración a las deudas de la persona física o moral.
Está tipificada en la Ley 25-2015, con fecha del 28 de julio de ese mismo año. Es una Ley dirigida a particulares o autónomos. Todo su marco legal está establecido para tratar de salvar, en la medida de lo posible, el cobro de los acreedores.
Requisitos necesarios para aplicar la Ley de Segunda Oportunidad
Uno de los objetivos de la Ley de la Segunda Oportunidad es trazar un plan de pago viable, junto con un calendario de pagos que no sea mayor a los 10 años. Además, para que esta ley sea procedente, hay que considerar los siguientes aspectos:
- La persona física que se apegue a esta ley deberá declararse insolvente por motivos ajenos a su voluntad.
- Asimismo, deberá demostrar que ha actuado de buena fe y de forma legal. Es decir, debe aclarar que su endeudamiento no fue algo premeditado, y que su intención en todo momento ha sido hacerle frente a su deuda, solo que las circunstancias no le permitieron honrar ese compromiso.
- Además, se proponen mecanismos o sistemas para la cesión de las deudas como, por ejemplo, la liquidación de acciones o de cualquier bien tangible que tenga la persona física o moral.
- Demostrar que las deudas contraídas no superan los 5 millones de euros.
- La persona con deudas pendientes también debe demostrar claramente que no ha caído en delitos contra el Gobierno o contra terceras personas, por lo menos en los últimos 10 años.
- Si la persona deudora ha sido condenada con anterioridad por delitos contra la Seguridad Social o contra el Gobierno, entonces, la segunda oportunidad únicamente dependerá de que el dictamen indique que la primera vez salió sin delitos.
Pros de la Ley de Segunda Oportunidad
- Aporta estabilidad económica: La aprobación de la Ley de Segunda Oportunidad ha permitido a muchas personas estabilizar su situación financiera, evitando que se vean en la necesidad de solicitar una quiebra o suspensión de pagos. Esto les permite recuperar el control de sus finanzas y planear mejor su futuro financiero.
- Da una segunda oportunidad: Esta ley permite a aquellas personas que han pasado por una situación complicada, una segunda oportunidad para reorganizar sus finanzas. Esto les permite salir adelante sin tener que asumir las consecuencias negativas que conlleva el estado de insolvencia.
- Ofrece facilidades para el pago de deudas: Con la Ley de Segunda Oportunidad, el deudor puede solicitar un plan de pagos a los acreedores para poder regularizar la situación. Esto permite a los deudores tener una mayor flexibilidad para pagar sus deudas y hacer frente a sus compromisos financieros.
Contras de la Ley de Segunda Oportunidad
- No siempre es fácil de obtener: A pesar de que la ley de segunda oportunidad puede ser una gran ayuda para aquellas personas que se encuentran en una situación financiera difícil, no siempre es fácil de obtener. En muchos casos, los acreedores no están dispuestos a aceptar los planes de pagos y la ley no siempre es suficiente para garantizar que el deudor podrá salir adelante.
- Puede ser costoso: La solicitud de una segunda oportunidad puede ser un proceso costoso. Los honorarios de los abogados y los costes administrativos relacionados con el trámite pueden ser elevados, lo que puede hacer que la ley no sea una opción viable para aquellas personas con un presupuesto ajustado.
- No es una solución definitiva: La Ley de Segunda Oportunidad no es una solución definitiva para los problemas financieros. Si bien puede ayudar a los deudores a salir de una situación complicada, es importante recordar que la ley no elimina las deudas, sino que únicamente da una prórroga para su pago. Por lo tanto, es importante que los deudores sean responsables con el dinero y planifiquen sus finanzas para evitar caer en una situación similar en el futuro.
¿Cómo se puede complementar la Ley de la Segunda Oportunidad?
El plan de pago que se genere por esta ley lo puedes complementar con un préstamo para unificar deudas.
Este instrumento financiero es una buena alternativa para hacerle frente a varios compromisos y reunificarlos en un solo pago mensual. Además, te ayuda a controlar mejor tus gastos para no volver a caer en impagos por falta de liquidez.
No obstante, para tener mayor claridad antes de dar este paso, tal vez sea necesario consultar con un abogado especialista que te ofrezca el asesoramiento correspondiente.
Si eso te resulta muy complicado, también puedes revisar un comparador de préstamos personales para ver las distintas alternativas que ofrecen algunas entidades financieras. De hecho, muchos bancos ofrecen préstamos para reunificar deudas y hasta sin necesidad de un aval.
El objetivo es que consigas una forma efectiva y viable para pagar lo que adeudas y puedas recuperar tu estabilidad económica.
¿La Ley de la Segunda Oportunidad se puede solicitar gratis?
Este es un procedimiento que tiene un coste asociado. Es decir, no es gratis. Además, su costo depende de distintos factores. Pero para que te hagas una idea, tiene un coste promedio de 3.520 euros.
Algunos de los criterios que hacen variar su coste serían los siguientes:
- Si existe un aval de vivienda.
- El nivel de ingreso que tenga el solicitante.
- Los honorarios profesionales de los abogados, gestores, notarios, entre otros.
- El régimen económico matrimonial y el aval de la deuda, entre otros criterios.
Ley de la Segunda Oportunidad: recomendaciones para tener una vida financiera saludable
Ante una situación financiera complicada, el primer paso es analizar detenidamente cuál es la mejor estrategia para poder salir de ella. Lo bueno es que siempre hay una solución para esos inconvenientes.
Una decisión inteligente es hacer la reunificación de deudas para que sea más fácil de exonerar o pagar.
Además, una buena planificación es un paso acertado para salir de dudas y evitar impagos. Toma en cuenta que las personas físicas o morales, pueden caer en ciertos riesgos y en situaciones económicas difíciles.
Lo importante es actuar de buena fe, tener un plan de pago, buena disposición y buscar un asesoramiento oportuno.
Si tienes dudas sobre la Ley de la Segunda Oportunidad, puedes dejarnos un comentario y con gusto lo responderemos.